Uno de los aspectos que más me gusta de viajar es la comida. Pero no es por glotona. Es porque soy de las que cree que la cocina es una parte fundamental de una cultura. Así como aprendes de una cultura por medio de los lenguajes, la música y los bailes, también aprendes de su gastronomía.
En estos meses que he estado viviendo en Corea, he tenido la oportunidad de no solo comer sus platos típicos, sino también de prepararlos. Anteriormente te he mostrado aquí en el blog una clase de cocina que tomé en Seúl, mi travesía preparando el kimchi, el proceso para preparar el magkeolli… y ahora te estaré mostrando el primer tour gastronómico que hice en la región de Andong, Corea, gracias a la invitación de Gastro Tour Seoul.
El turismo gastronómico es ideal tanto para los que no somos muy aptos para la cocina, como también para los que les encanta cocinar. Hay una balanceada actividad entre cocinar, observar y glotonear. Más allá de ello, conocer a las protagonistas detrás del plato servido en la mesa y verlas en acción, es uno de los momentos más enriquecedores de hacer este tipo de turismo.
Andong es una ciudad al sureste de Corea que guarda una importante historia. Allí vivieron varios maestros que forjaron el confucionismo en el país durante la dinastía Joseon. Uno de ellos es Toegye Yi Hwang, el reconocido maestro que vivió entre 1501 y 1570 y que sale en el billete de 1000 KRW. Arquitectónicamente, en el área encontrarás bastantes hanoks —casas tradicionales coreanas— representativas de aquella era.
En el tour visitamos 5 diferentes hanoks pertenecientes a la nobleza, con algunas de ellas ocupadas por los descendientes del maestro confuciano Toegye. Conocí en total 5 mujeres ejemplares quienes me recibieron en sus hogares con una amplia sonrisa. No hablaban inglés, pero su amabilidad y su amor hacia la comida expresaron en donde las palabras se quedaron mudas.
Probé recetas que han sido pasadas de generación en generación. Unas totalmente propias de ciertas familias, y otras adaptadas con su propio sabor. Échale un vistazo a las siguientes fotos de lo que probé. De seguro encontrarás algo que tú tampoco conocías.
Bopuraggi: pescado seco desmechado
El primer plato que hicimos y probamos fue el bopuraggi (보푸라기). El bopuraggi es un acompañamiento que consiste en pescado seco desmechado. Con una mitad de pescado seco en una mano, y con cuchara en la otra, empezamos a raspar el interior del pescado obteniendo pequeñas hilachas que a simple vista parecían cesped.
La labor suena fácil, pero en realidad requiere bastante esfuerzo manual y muscular.
Cuando ya se tiene el pescado desmechado, se le agrega azucar, sal y aceite de sésamo. Y queda listo para comerlo junto a una buena porción de arroz blanco.
Songhwaju: vino de arroz
En un hanok conocido como Jeongjae Jongtaek y con más de 300 años de historia, probé varios bebidas alcohólicas tradicionales. Una de ellas fue Songhwaju (송화주), la especialidad de esta hanok. El Songhwaju es un vino con arroz que lleva, además de arroz, levadura, pedazos de pino y crisantemos. Es servido en una copita de bronce algo pesada y se toma frente a una mesita baja, medio arrodillada sobre un cojín en el suelo.
No sé mucho de vinos, pero tomarse esta bebida tradicional junto a la master en este tema, fue una grata experiencia.
Andong Jjimdak
Después de tanta bebida llegamos a otro hanok a preparar un plato típico del área: Jjimdak (안동찜닭), estofado de pollo con fideos de cristal. En grupos de 4, y con las instrucciones de nuestra chef, cocinamos una amplia porción de este plato. El proceso toma aproximadamente media hora, y estuve de buenas, porque en mi grupo estaba una filipina que es amante de la cocina y me salvó de arruinar la esperada cena.
Té y pasabocas de los 6 amigos
En un gran jardín dentro de la propiedad de un hanok, una amable coreana nos dio la bienvenida. Utilizando varios insumos naturales para preparar té y pasabocas: flor de loto, crisantemo, ciruelo, pinos y bambú, nos tenía preparado un desayuno elegante y muy nutritivo.
No sabría decirte cuál pasabocas está hecho con cuál florecita. Pero eso sí te confieso que no sabía que uno podría comer tantas florecitas tan sabrosas en una sola tanda.
Kalguksu: fideos cortados con cuchillo
Kalguksu (칼국수) es un plato de fideos coreanos. Literalmente significa knife cutting noddles, puesto que los fideos son hechos a mano y cortados con un cuchillo.
La señora de la casa, Yoon Eun-suk, lleva años cocinando esta receta que tiene 100 años de historia familiar. De principio a fin fui testigo del amor que ella le pone a esta comida.
No hay duda que el turismo gastronómico en Corea tiene potencial. Con la variedad de platos fuertes, bebidas y postres, encontrarás la comida que mejor se ajuste a tu paladar. No hace falta decir que mi parte favorita de este tour fue conocer las caras detrás de cada plato. Ahora, cada vez que coma Bopuraggi, Jjimdak y Kalguksu recordaré esos amables brazos que alguna vez compartieron conmigo su arte en la cocina.
Este artículo fue escrito en colaboración con Gastro Tour Seoul, como siempre las opiniones aquí expuestas son propias.
